Si se quiere que el servicio de mudanzas en Asturias sea un éxito hay algo de suma importancia y  en lo que venimos insistiendo en los últimos artículos: un correcto embalaje. Por ello, además de dar un servicio de mudanzas también ofrecemos lo necesario para realizar el embalaje. Pero a veces no llega solo con tener los materiales, también es importante saber cómo usarlos. Hoy vamos a explicar como embalar un frigorífico para la mudanza.

Lo primero es organizarse de cara a este momento. Primero, para que cuando se vaya a embalar a penas quede comida, con esto evitamos desperdiciar alimentos de manera innecesaria. También hay que tener en cuenta que lo ideal es que el frigorífico este desconectado 48 horas antes de comenzar a embalarlo.

Una vez esté vacía la nevera comenzaremos a retirar todos los elementos amovibles del interior. Cuando no quede ninguno desenchufaremos la nevera y la dejaremos abierta para que se atempere. Podemos aprovechar este momento para envolver todos los elementos que retiraremos con papel de burbujas y colocarlos en una caja de cartón que rotularemos con el nombre "frigorífico".

Pasadas las 48 horas o cuando la nevera ya no conserve frío, la cerraremos. A continuación la envolveremos con papel de burbujas, posteriormente la rodearemos con una cuerda o cinta para asegurarnos de que la puerta no se abra durante el transporte. Por último, podemos introducirla en una caja de cartón para asegurarnos de que durante el servicio de mudanzas en Asturias viajará lo más segura posible.

Si realizas tu mudanza con Transportes y Mudanzas Mario, podrás estar seguro de que tu nevera viajará en posición vertical. Nuestro servicio sabe como cuidar de cada elemento para que en cuanto comiences tu nuevo hogar ni te acuerdes de que tuvo que hacer una mudanza.